 esde fines de la
Edad Media y hasta mediados del siglo XIX, este lugar era conocido como sitio
o Plaza de la Laguna de la Mancebía o
compás de la Laguna (debido a la
existencia de una laguna en este espacio
desde el siglo XVI). En la primera mitad
del siglo XIX el topónimo Compás de la
Laguna designaba tanto a la actual Plaza
de Molviedro como a Gamazo, pues ambos
lugares servían de entrada o “compases”
al barrio. En torno a 1840 aparece ya
rotulado como Plaza de Molviedro, en
homenaje al arquitecto Manuel Prudencio
de Molviedro, quien, bajo el mandato del
asistente marqués de Monterreal, llevó a
cabo en el siglo XVIII la remodelación
urbana de toda esta zona de la antigua
Mancebía. (ojo: el termino Mancebía se
debe a que esta zona fue conocida como
el enclave de la prostitución sevillana
de aquélla época).
Mucho ha variado en el tiempo los usos y
funciones de esta plaza. En el siglo
XVIII cumplía un papel comercial, pues
se instaló en ella, bajo soportales, un
mercado de pan, hortalizas y pescado,
suprimido en 1838, fecha en la que el
Ayuntamiento cubrió los soportales y
cambió la fisonomía del espacio.
En ese
mismo siglo hubo un proyecto de erigir
en el centro de la plaza una estatua del
rey Carlos III, impulsor del saneamiento
de esta parte de la ciudad conocida como
la Mancebía. Al parecer el monarca
declinó el ofrecimiento y el proyecto
nunca se llevó a cabo.
Durante la Semana Santa esta Plaza de
Molviedro se convierte en un bonito
rincón cofradiero, en el que podemos ver
el discurrir de Jesús Despojado (el
Domingo de Ramos), Santa Cruz (Martes
Santo), La Quinta Angustia (el Jueves),
El Gran Poder y el Calvario (durante la
madrugá) y Monserrat (el Viernes Santo). Texto: José Alfonso
Muriel - Fotos: Francisco Santiago |