Bajo el seudónimo de Tirso de Molina se encintraba
Fray Gabriel Téllez, nacido en 1584 y fallecido en la localidad de
Almazán en 1648. Fue uno de los grandes dramaturgos del Siglo de Oro
español, manteniéndose en su producción dramática fiel a las enseñanzas
de Lope de Vega. Se sabe que se ordenó en el convento mercedario de
Guadalajara en 1601 a la edad de 17 años, pasando posteriormente al
monasterio de Estercuel, entre 1614 y1615), viajando a Santo Domingo en
1616, regresando a España dos años más tarde.
Curiosamente, una Junta de Reformación le condenó a destierro de la
corte por escribir comedias profanas. En 1626 estaba de nuevo en la
corte y fue nombrado Comendador del convento de Trujillo. Fue confinado
en el convento de Cuenca por orden del P. Salmerón, Visitador General,
al parecer por las mismas causas que promovieron su destierro. En 1632
fue nombrado Cronista de su Orden; en 1645 fue Comendador del convento
de Soria, y al año siguiente, Definidor Provincial de Castilla.
En su producción literaria, de más de 300 comedias, se llegaron a
imprimir por partes en Sevilla (1627), Madrid (1635), Tortosa (1634) y
las dos ultimas en Madrid en 1635 y 1636. Como dramaturgo y religioso
que era, escribió varios autos sacramentales (El colmenero divino, No le
arriendo la ganancia, El laberinto de Creta), varias comedias bíblicas
(La mujer que manda en casa, sobre la historia de Acab y Jezabel; La
mejor espigadera, sobre Ruth; La vida y muerte de Herodes; La venganza
de Tamar) y varias comedias hagiográficas (la trilogía de La Santa
Juana, La ninfa del cielo, La dama del Olivar).
Extrajo de las historias y leyendas nacionales argumentos de numerosas
comedias: la trilogía de los Pizarro (Todo es dar en una cosa, Amazonas
en las Indias y La lealtad contra la envidia); la historia de Martín
Peláez (El cobarde más valiente), o la de María de Molina (La prudencia
en la mujer).
Entre las comedias de carácter destacan Marta la piadosa y El vergonzoso
en palacio. Al grupo de comedias de intriga pertenecen La villana de
Vallecas, Desde Toledo a Madrid, Por el sótano y el torno y Don Gil de
las calzas verdes. Se le atribuyen, aunque no se incluyeron en las
Partes de sus comedias, dos obras de contenido filosófico de gran
importancia: El burlador de Sevilla (donde nace la leyenda de
D. Juan
Tenorio) y convidado de piedra y El condenado por desconfiado. Su obra
en prosa incluye una Historia de la orden de la Merced y dos obras
misceláneas: Cigarrales de Toledo (1621) y Deleitar aprovechando (1635). |