na
noche cualquiera de un mes cualquiera.
Al cobijo de la arboleda que precede al
antiguo Hospital de las Cinco Llagas
(hoy Parlamento de Andalucía), o en los
huecos de los puentes que cruzan el
Guadalquivir a la altura de la Expo,
suenan los bellos acordes que engalanan
las sombras y deleitan a los curiosos
que por allí deambulan.
Es la música
celestial de las numerosas bandas de
cornetas y tambores, afinando sus
instrumentos como preludio al gran
recital que ofrecerán en la Semana
Grande de Sevilla, banda sonora que
acompañará a Cristo desde el mismo
momento de la Entrada en Jerusalén,
hasta su Resurrección.
Con estas páginas,
intentaré dar una visión particular de
algo que esta presente en el ambiente de
Sevilla, una muestra de la Pasión de
Jesús que afronta todo su esplendor en
la Semana Santa, pero que la ciudad vive
durante todo el año, en cada barrio, en
cada reunión, en cada domicilio
particular.. en el alma de todos los
sevillanos.
ista:
Las Tertulias Cofrades
Como ya he comentado,
cualquier época del año es buena para
que Sevilla recuerde al visitante cuál
es su Semana Grande, cuál es su devoción
y su religión, por encima de cultos,
superando las creencias. Valgan como
ejemplo cualquier tertulia cofrade, de
las muchas que cohabitan nuestros
barrios:
Son las 21:00 horas y
el eco de redobles de tambores que
marcan el paso, se va intensificando
poco a poco, hasta llegar a la sede de
la Tertulia. Comienza el recital de
marchas procesionales al calor de un
público fiel, siempre dispuesto a
postrarse ante la música sacra que
magistralmente evoca la pasión y muerte
de Cristo... Rememorando a los cuatro
vientos, dando todo de sí,
intensificando y magnificando la obra
cumbre imaginera que a golpe de gubia
trasformó la madera en sentimiento.
Y así cada año, en la
celebración del aniversario fundacional
de la tertulia, o en la presentación de
su cartel anunciador de la Semana Santa,
amén de otras muchas ocasiones en las
que se organizan exposiciones de arte
cofrade (orfebrería), diapositivas de
fotógrafos noveles y profesionales,
coloquios sobre temas sacros, almuerzos
y cenas fraternales y muchos otros actos
en relación con el tema de su existir.
Hay muchas tertulias
cofrades, "Ahí Queó", Entrevarales",
"Bambalinas", "A Esta Es", "Las Dos
Orillas", "Azahar", "La Madrugá", "El
Pabilo", etc. En cada Distrito Municipal
podemos encontrar varias, pero sirvan
las anteriormente nombradas como botón
de muestra de esta forma constante de
entender las cofradías en nuestra
tierra. (Carteles editados por la
Tertulia "El Guardabrisa" 2001 y 1997.)
ído: Letras de
mágicos sonidos
Como preludio al gran
acontecimiento, Sevilla se prepara
intensamente para revivir cada año su
Semana Santa, siendo quizás el acto
principal el Pregón que se realiza en el
Teatro de la Maestranza y que inaugura
esos siete días cruciales para la
capital hispalense. Palabras y versos
que levantan el vello en la piel y hace
surgir la congoja en el alma.
¿Y quién no ha oído
hablar de la Saeta?, esa mezcla de dolor
y llanto que prende en el silencio, de
padre flamenco y de madre Poesía. Cantar
hondo de culto que el sevillano sabe
escuchar con sublime respeto, acto que
tiene su mayor relevancia en la
"Exaltación a la Saeta" que se celebra
cada año.
Pero si la quiere
vivir en su pleno apogeo, vea la salida
de la Hermandad del Silencio, La primera
de la Madrugá, y sabrá el porqué son
sinónimos Saeta y Silencio. Parte
fundamental de la Semana Santa son sus
Bandas de Cornetas y Tambores,
Agrupaciones Musicales, Tríos de Capilla
y, por supuesto, Las Bandas de Música.
Los primeros, y
segundos acompañan a los pasos de Cristo
y preceden a las Cruces de Guía; la
música de capilla se interpreta en las
cofradías que van en silencio y las
Bandas de Música acompañan a María
Santísima en su pesar, además de, como
es el caso de la Los Servitas, acompañar
a su misterio.
Y a pesar de las
normas municipales que hacen de esta
ardua labor pasionista, casi una condena
para los músicos que comparten su labor
profesional con el frío, la lluvia, las
inclemencias y las multas... "Réquiem",
"Amor de Madre", "Amargura", "Esperanza
Trianera", "Presentado a Sevilla" y
"Rocío" son algunos de los temas
musicales que recorren nuestros oídos
mientras hacemos lo posible por
controlar esas lágrimas de emoción que
nacen al amparo de una buena "chicota" o
de esa hermosa mecida que los costaleros
regalan a la Madre de Dios.
Pero también Sevilla
tiene su música sacra. Sobriedad y
Seriedad conformado notas de dolor y
clemencia hacia Cristo con la música de
capilla, o en el concierto que se hace
gloria en el Miserere de Eslava a
celebrar en la Catedral en días previos
a la Semana Santa.
¡Tos por igual,
valientes". A esta es!. Y, tras un golpe
seco de llamador, el paso se eleva hasta
el cielo. Son las palabras del Capataz
mandando a los costaleros a iniciar la
andadura del paso, al igual que con las
palabras "Ahí Queó" les indica el final
de la misma.
Para terminar, el
sonido de las alpargatas de los
costaleros, hermoso ritmo que se forma
en el avanzar del paso, y que, en el
silencio formado de la fe del pueblo,
suena a música celestial. otra forma de
entender el sonido (para ciertas
personas), es aclamar a voces a las
Virgen cuando pasa por su barrio, hecho
este que, en algunas ocasiones llega a
rozar el ridículo.
Y si tiene la mala
suerte de caer enfermo en su visita a
esta gran pasión sevillana, no se
preocupe, las televisiones locales y las
radios le informarán puntualmente de las
salidas, entradas y carrera oficial de
las hermandades, sin bullas, sin prisas,
aunque les aseguro que no tiene nada que
ver con la realidad del momento, con la
vivencia de sentir la cofradía en
directo.
usto:
Los bares cofrades.
Con el mismo nombre
de la flor, encontramos en el Barrio de
San Julián el "Azahar", uno de los
primeros bares cofrades, que entre buen
tapeo, una cerveza helada, olor a
incienso y sones cofrades, nos sumerge
durante todo el año en ese
característico ambiente que hace a
nuestra ciudad un Vía Crucis de
constante devoción.
Pero, al igual que
este, otros nombres cofrades dan vida a
números bares, donde la tertulia y la
sabiduría se mezclan con las
fotografías, con las imágenes, y con
productos típicos de la tierra, museos
iconográficos de la Semana Grande de
Sevilla. Y encontramos el "Albores", en
la calle Palma del Río en Pío XII, "La
Madrugá" en San Hermenegildo, "Casa
Ricardo" en San Lorenzo, y muchos más,
pero como referencia pueden visitar
estos y comprobar ustedes mismos por qué
aparecen nombres de bares relacionados
con la Semana Santa.
Como dato atípico en
este apartado, voy a incluir un bar que,
aunque no resulta cofrade a primera
vista, si que resulta punto crucial de
visita para todo aquel que se encuentre
en la zona de Santa Catalina. Me refiero
al "Rinconcillo" situado entre la calle
Gerona y la Plaza de los Terceros.
Recomendamos que deguste sus espinacas y
pavías mientras ve salir o recogerse la
Hermandad de la Exaltación, conocida por
"Los Caballos" y que procesiona el
Jueves Santo.
Quizás también deba
hablarles de uno reciente, que lleva por
nombre "la Reja", y es llevado por
músicos de la Agrupación Musical de "Los
Gitanos", que se ha convertido en punto
de reunión de la "alta camarilla
cofrade". "También tenemos en pleno
barrio de Santa Cruz "La Fresquita",
donde cada jueves la Contra Tertulia "El
Homo Cofrade" realiza sus "cabildos"
cofrades. Altas personalidades para una
alta alcurnia sin tapaduras en sus
bocas... Este año Joaquín Caro Romero ha
recibido el galardón anual de esta
contratertulia, premio que ya recibieran
en años posteriores el Arzobispo de
Sevilla, Carlos Herrera o Javier Criado.
acto:
Tocar a Dios.
Resulta curioso pero,
para el visitante, uno de sus fines
principales es intentar tocar las
imágenes lo cual llega a ser casi un
reto. Lo que ellos no saben es que eso
es imposible. Vayamos por partes; es
imposible tocar las imágenes cuando
están sobre las andas (paso), pero todas
las hermandades realizan actos previos a
la Semana Santa (Triduos, Quinarios,
etc...) en los cuales, a su culminación
suelen poner a sus imágenes titulares en
besapiés o besamanos, único momento real
en el cual podemos tocar a las imágenes.
Otro acto muy
particular es el tocar los respiraderos
del paso cuando está parado o pasando
junto a nuestro lado, esto no se debe de
hacer, porque estamos dañando el
patrimonio d ela cofradía, en realidad
lo que se debe de hacer es "santiaguarse"
ya que no está permitido el tocar los
pasos, aunque la realidad sea otra muy
distinta.
Otra forma de activar
este sentido es la cera que se desprende
de los cirios portados por los
nazarenos. Les resultará muy curioso la
comitiva de niños que se acercan a los
nazarenos para pedirles cera, la cual
acumulan poco a poco, hasta formar una
gran bola.
De todos modos esto
llega a convertirse para el nazareno en
su verdadera penitencia, ya que el acoso
de algunos de estos críos (y no tan
críos), puede crispar al más santo de
los varones, sobre todo en el tramo
comprendido por la carrera oficial. La
otra cara de esa moneda, es la sonrisa
que muestran los niños cuando reciben un
caramelo de los hermanos nazarenos.
lfato:
Incienso y Azahar.
Nos trasladamos hasta
principios del mes de marzo. Los
naranjos empiezan a mostrar esos tonos
blancos que en breve darán forma al
azahar, perfumando las calles
hispalenses con ese característico aroma
que la hace diferente, que avisa de que
la primavera no puede esperar más, que
pronto, muy pronto, Dios recorrerá
Sevilla acompañado de su pueblo.
Esta vez elegimos el
mes de junio y damos un paseo por el
centro histórico, tomando como punto de
partida la Plaza de la Encarnación,
paseando por la calle Puente y Pellón en
dirección a la Plaza del Salvador.
Justamente, entre estos dos puntos, esta
la calle Córdoba, la cual tiene un aroma
exótico que invade el aire y embriaga el
alma, un olor a Iglesia, a santidad que
purifica los sentimientos.
Es el incienso, que
venden en pequeños puestos ambulantes;
aroma que pertenece al mayor Templo
erigido a Cristo y conocido por
"Sevilla", la Tierra de María Santísima.
Esta mezcla de esencias procedentes de
oriente que precede a los pasos en la
Semana Santa y que en esta concreta
calle sevillana podemos disfrutar
durante todos los días del año esencias
que surgen de incensarios con forma de
Hornos de la Cartuja y que prende
gracias a las pastillas de carbón
incandescente.
Quizás usted, en su
particular visión externa de la pasión,
no entienda qué relación hay entre el
olor y la devoción, pero si piensa
visitarnos en Semana Santa, podrá
entender perfectamente la gran relación
y la reciprocidad entre estos términos,
sentimientos y sentidos hechos uno. |